Consejos e ideas para celebrar una boda en cada estación

11 Ago Consejos e ideas para celebrar una boda en cada estación

Dependiendo de la estación del año que escojas para casarte: verano, primavera, otoño o invierno, deberás tener en cuenta diversos aspectos que cambian de hacerlo en una fecha u otra. Por ejemplo, el espacio donde celebres tu boda no sería el mismo en verano que en invierno. En uno puedes coger una terraza al aire libre, mientras que en la otra estación tendrá que ser recogido y con focos de calor.

El vestido de la novia también será diferente: en época de calor puede coger gasas y encaje finos, mientras en épocas frías deberás optar por un vestido de tela más gruesa y ponerse un abrigo o chal.

Por lo tanto, vamos a mostrarte en este post que detalles, flores, decoración, e incluso que tipo de tarta sería idónea, para mostrar en tu boda dependiendo de la estación del año que la celebres.

Boda en invierno

Aunque el paisaje sea frio o helado, no es motivo para decorar con flores rojas, pero de estilo calmado. Un arco de flores para la ceremonia, puede perfectamente ser el testigo de vuestro enlace. La ceremonia es conveniente celebrarla al mediodía, donde sale el sol.

Las mismas flores pueden decorar los centros de flores y tu ramo de novia, que destaque ante el blanco de tu vestido, preferible hecho de tela gruesa. Provee un abrigo o chal para salir fuera. El novio también puede llevar un detalle en la solapa de su traje con flores de invierno, tipo edelweiss.

Un detalle fantástico es llegar con un trineo tirado por caballos. En el convite, opta por una decoración con flores invernales, chimeneas, velas y todo lo que implique dar calidez. Una tarta blanca con detalle de flores será perfecta.

Boda en otoño

Una boda celebrada en otoño destacará, sobretodo, por la presencia de flores secas en el ramo de la novia, el arco floral de la ceremonia, el centro de flores de la mesa de los invitados y novios, detalles en el peinado de la novia y solapa del traje del novio, e incluso en la tarta. También serían preciosas si decorarán una bicicleta, en el que podrían llegar los novios hasta el banquete, lo cual es una idea muy original y divertida.

La presencia de calabazas y hortalizas que decoren los stands o las mesas para celebrar el convite, da un toque acogedor y campestre a la boda. También podéis optar por ofrecer unas mantas para taparse si hacéis algo al aire libre. Una tarta en tonos grises y blancos con frutas y flores secas, será la puntilla a una boda otoñal preciosa.

Boda en primavera

Como seguro adelantarás, si, las flores son las claras protagonistas en una boda primaveral, aunque se recomienda que tengan tonos pasteles, y no sean tan llamativas como podrían ser en invierno o en otoño, para que den más color. La primavera ya de por si es alegre, por lo que una decoración en tonos pastel es la adecuada.

En la decoración de las mesas, tarjetas de invitación, tarta y demás, es acertado optar por el color blanco y poner ápices en tonos pastel, como rosas pálidos y lilas suaves. Una boda encantadora y súper romántica.

Boda en verano

Para hacer una boda en verano, es una buena idea reflejar los tonos rosados y anaranjados en detalles, flores o mobiliario, ya que nos recuerda al sol y a las flores.

Por supuesto, en verano es mejor hacer la ceremonia y el banquete al atardecer, cuando el calor del sol es menor, para que los invitados están más cómodos y no estén sudando todo el tiempo. Además, a estas horas, al aire libre se está muy bien, por lo que es propicio para hacer también el banquete. Decora una tarta rosada con flores y el ramo para que contraste con el vestido de la novia, convenientemente hecho con gasas y prendas finas.